Resultaría difícil imaginar vehículos particulares circulando por el carril destinado exclusivamente a autobuses y taxis en el centro de cualquier ciudad española, sin miedo a cometer una infracción con su correspondiente multa. Pues en los próximos meses esta imagen será una realidad, eso sí, más allá de nuestras fronteras.
Los conductores de vehículos eléctricos (VE) tendrán vía libre para circular por este tipo de carriles, en áreas de Nottingham, Bristol, Milton Keynes y Londres, ciudades británicas ganadoras del concurso de ideas innovadoras del programa Go Ultra Low City propuesto por el Departamento de Transporte del Reino Unido.
El gobierno británico quiere situar al país al frente de la revolución del transporte eléctrico y la reducción de emisiones contaminantes. La más reciente de sus actuaciones para conseguirlo, ha sido anunciar que destinará una partida de 40 millones de libras a trasladar del papel a la realidad las propuestas para promover el vehículo verde que ha resultado ganadoras en la convocatoria. Una de las propuestas estrella incluidas, es la apertura de unas 25.000 plazas de aparcamiento para propietarios de coches eléctricos que les permitirá ahorrar al menos 1.300 libras al año.
Ideas para ser realidad
La mayor partida presupuestaria irá destinada al área metropolitana de Londres, que con 13 millones de euros pondrá en marcha los llamados ‘Barrios del futuro’ y que serán los distritos en los que tengan prioridad los vehículos de ultra baja emisión.
Así, en el municipio de Hackney, situado junto a la City londinense, habrá calles electrificadas con puntos de recarga para vehículos y Harrow, situado al noreste de Londres, desarrollará zonas de baja emisión en las que los propietarios de vehículos eléctricos tendrán aparcamientos para ellos y prioridad circulatoria en sus calles. Por su parte, las autoridades locales del área de Westminster ya facilitan plazas de parking gratuitas para este tipo de coches y su intención, recogida en su propuesta, es alcanzar los 70.000 vehículos eléctricos vendidos en 2020 y al menos 250.000 coches de estas características para 2025.
En la ciudad de Milton Keynes, que cuenta con más de 185.000 habitantes, piensan otorgar a los vehículos eléctricos la misma prioridad que los autobuses en los carriles destinados a este transporte colectivo, convirtiendo así el denominado carril bus en carril de baja emisión también. Además planean construir un centro de experiencia del vehículo eléctrico en que recibirán información y asesoramiento sobre este transporte, así como podrán beneficiarse de un servicio de préstamo de coches por cortos periodos de tiempo. Para todo ello cuentan con 9 millones de libras del programa Go Ultra Low.
Por su parte Bristol utilizará los 7 millones de libras que le ha asignado el Departamento de Transporte para habilitar tres carriles destinados a vehículos compartidos en la ciudad, ofrecer a los dueños de coches eléctricos plazas de parking gratis para residentes e instalar más de 80 puntos de recarga rápida en diferentes lugares de la ciudad. Para animar a sus vecinos a hacerse con un VE pondrá en marcha un plan de alquiler de coches por cuatro semanas con el fin de que prueben todas sus ventajas.
Será en las regiones de Nottinghamshire y Derbyshire donde los conductores de coches eléctricos puedan acceder a los más de 20 kilómetros de carril bus a lo largo de sus principales arterias y tratarán de involucrar al tejido empresarial y de negocio locales incentivando la compra de vehículos eléctricos mediante un programa por el que podrán probar los coches y sus ventajas durante un tiempo antes de comprarlos.
Además el plan asigna 5 millones de libras a iniciativas muy concretas en otras zonas del Reino Unido. En la Dundee se construirá un nuevo centro de recarga y en la región de York planean crear un parking que disponga de cubiertas solares y un punto de carga para las bicicletas.
Metas económicas
La reducción de emisiones contaminantes para cumplir con los objetivos marcados en el Horizonte 2020 no es la única meta de este plan. Y es que el Gobierno británico también busca crear nuevos empleos con una mayor cualificación en la industria automovilística a través del aumento de las ventas de vehículos verdes, mucho de los cuales se fabricarán y se probarán en el Reino Unido, y trata de convertirse en país pioneros a nivel internacional en cuanto a tecnologías para la reducción de emisiones, según ha reconocido el secretario de Transporte británico, Patrick McLouhlin.
Es a la investigación para el desarrollo de innovaciones como vehículos más ligeros y baterías de mayor duración para los coches, a lo que se destinarán gran parte de los 600 millones de libras destinados al paquete de medidas de la Oficina de Vehículos de Baja Emisión hasta 2020, partida multimillonaria de la que también forman parte los 40 millones del programa Go Ultra Low Cities.