El proyecto europeo RI-Urbans (Research Infrastructures Services Reinforcing Air Quality Monitoring Capacities in European Urban & Industrial AreaS), coordinado por el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC) y la Universidad de Helsinki (UHEL), se ha lanzado oficialmente con el objetivo de adaptar las herramientas de servicio de las infraestructuras de investigación atmosférica para mejorar la calidad del aire en zonas urbanas e industriales.
RI-Urbans reúne a 11 ciudades y 28 socios de toda Europa con la finalidad de implementar herramientas avanzadas de servicio de las infraestructuras de investigación que refuercen las capacidades de monitorización de la calidad del aire en urbes y puntos críticos industriales.
Esta iniciativa ha dado comienzo este mes de octubre y tendrá una duración de cuatro años. Cuenta con un presupuesto total de 8,45 millones de euros, de los cuales, el programa Horizonte 2020 de la Unión Europea aporta 8 millones.
Proyectos piloto en nueve ciudades
RI-Urbans pretende aplicar la investigación avanzada de la calidad del aire a la evaluación de los efectos de la contaminación del aire en la salud y al desarrollo de políticas para reducir la polución.
De esta manera, el proyecto se centrará en las nanopartículas ambientales y en las partículas en suspensión, sus tamaños, constituyentes, contribuciones de la fuente y precursores gaseosos, evaluando parámetros de la calidad del aire innovadores y sus efectos en la salud para demostrar el valor añadido de la implementación de herramientas avanzadas de servicio con este fin.
La iniciativa mejora las sinergias entre redes locales de monitorización de la calidad del aire e infraestructuras europeas de investigación sobre composición atmosférica (Actris e Iagos). Esto permite una interacción bidireccional para desarrollar y testar soluciones novedosas y armonizar los flujos de datos en entornos urbanos reales con una cobertura paneuropea.
De la misma manera, mejorará el modelado y los inventarios de emisiones para la valoración de políticas e implementará proyectos piloto en nueve ciudades -Barcelona, Atenas, Birmingham, Bucarest, Helsinki, Milán, París, Róterdam-Ámsterdam y Zúrich- para probar las nuevas herramientas.