Fue elegida para encabezar la Red Española de Ciudades Inteligentes en la última Asamblea General de este organismo y, tras unos meses de reorganización y planificación, ha presentado junto al resto de integrantes de la Junta Directiva su proyecto de trabajo para el futuro de la Red. Núria Marín, alcaldesa de L`Hospitalet, nos cuenta cómo entiende el concepto de Ciudad Inteligente, cómo cree que debe evolucionar la RECI y qué objetivos quiere cumplir durante su presidencia.
ESMARTCITY: Han pasado cuatro meses desde que resultó elegida nueva presidenta de la Red Española de Ciudades Inteligentes, una red colaborativa ya consolidada y con indudable prestigio, creada para dar impulso al concepto de Smart City en España ¿cuál es su visión de RECI en el momento actual? ¿Se abre una nueva etapa para esta red de ciudades?
Núria Marín: Iniciar una nueva etapa es siempre estimulante. Y más cuando se asume un cargo al frente de una asociación que, como RECI, goza de gran prestigio y solvencia. Una red que engloba a 78 ciudades españolas que trabajan por el desarrollo social y económico y por la mejora de las condiciones de vida en nuestros pueblos y ciudades, a través de la innovación y del conocimiento. Es, por tanto, un gran reto que asumo con ilusión, en un momento como el actual.
ESMARTCITY: En la primera reunión de la nueva Junta Directiva se acordó la elaboración de un Plan de Trabajo para la RECI. ¿Qué líneas maestras incluye el nuevo Plan? ¿Cuáles son sus principales objetivos a corto y medio plazo?
Núria Marín: Acabamos de aprobar nuestro Plan de trabajo para el período 2017-2019. Desde RECI apostamos por la transformación real de los territorios, con una estrategia que va en diferentes líneas: un funcionamiento en red colaborativa y que genera un espacio donde todos sus miembros puedan desarrollar políticas públicas innovadoras; el desarrollo de una administración más próxima y eficiente que contribuya a su modernización; la consolidación de la RECI como referente de estos procesos y como interlocutor de las ciudades a las que representa; la captación de recursos para desarrollar políticas públicas de forma sostenible y, por último, una buena comunicación, para que los ciudadanos puedan compartir los esfuerzos en esa transformación inteligente de las ciudades.
ESMARTCITY: En el momento de su nombramiento afirmó que en esta nueva etapa se iba a trabajar también en el aumento de pluralidad y transparencia de la Red, ¿qué mecanismos se van a poner en marcha para conseguirlo?
Núria Marín: Así es, la transparencia y la pluralidad encabezan mi lista de prioridades para este mandato. Precisamente, esta pluralidad se verá reforzada en una futura colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), asociación que agrupa más de 7.000 ayuntamientos, diputaciones, consejos y cabildos insulares, y en la que están representados más del 90% de los gobiernos locales españoles. Gracias a esta colaboración, ambas entidades podremos sumar esfuerzos y compartir proyectos para convertir nuestras ciudades y pueblos en unos espacios más amables y humanos.
El objetivo es conseguir administraciones más accesibles y participativas, que acerquen la gestión municipal, los resultados obtenidos y los recursos utilizados a la ciudadanía. De esta manera tendremos ayuntamientos más eficientes y próximos a la ciudadanía, e incrementaremos la confianza en las instituciones.
ESMARTCITY: Además, se refirió a la necesidad de potenciar el concepto “social” en las Ciudades Inteligentes. ¿Qué modelo de Ciudad Inteligente se quiere alcanzar? ¿Cuáles serán las prioridades en esta línea?
Núria Marín: Tenemos que convertir los municipios en un espacio de oportunidades y situar a las personas y su bienestar como prioridad en la gestión municipal. Yo también me formulo algunas preguntas: ¿qué ciudad es más inteligente: aquella que utiliza más sensores o la que genera más igualdad de oportunidades?, ¿qué ciudad es más inteligente: aquella que tiene una app de las bibliotecas públicas o aquella que consigue incrementar el número de usuarios de las mismas?. Con esas premisas y sobre esas reflexiones debemos plantear cómo queremos que sean las ciudades del futuro.
Llevamos años trabajando con éxito en la implantación de soluciones smart para la mejora de nuestro espacio público —eficiencia energética, gestión de los residuos, movilidad, etc.— y ahora los municipios exploramos nuevas soluciones inteligentes aplicadas a los servicios a las personas —educación, salud, cultura, deportes, accesibilidad, etc. De esta manera generamos proyectos que suman, que multiplican la cohesión social, que garantizan los derechos de las personas y mejoran, sin duda, de manera notable la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas.
ESMARTCITY: ¿Qué importancia le otorga la RECI a la colaboración público-privada en el desarrollo de las Smart Cities?
Núria Marín: El sector privado es estratégico a la hora de desarrollar soluciones a los retos de las ciudades. Siempre con el criterio y el liderazgo de los gobiernos locales. Además, es del todo necesario implicar a las universidades españolas, a sus investigadores, para que se produzca una transferencia real de conocimiento de las aulas a las calles y plazas de nuestros pueblos y ciudades, con una estrategia de crecimiento y colaboración entre las propias universidades y el sector privado. Poner la innovación y el conocimiento al servicio de las ciudades.
La especialización inteligente se basa en el esfuerzo conjunto de empresas, centros de investigación y universidades que trabajan con las autoridades locales para identificar y definir las áreas más interesantes para desarrollar el tejido productivo de cada ciudad.
ESMARTCITY: A su juicio y como alcaldesa del Ayuntamiento de L’Hospitalet, ciudad con más de 250.000 habitantes, ¿cree que las administraciones locales llevan buen ritmo, con respecto a otros sectores, en cuanto a su digitalización?
Núria Marín: Los procesos de modernización de las organizaciones siempre son complejos, y especialmente en las apps, ese es uno de nuestros retos. Con la digitalización no se acaba el proceso, es necesario además un cambio de cultura y de dinámicas en la propia organización, así como un proceso de interiorización por parte de la ciudadanía en su relación con la administración. Se trata de un proceso que requiere su tiempo.
ESMARTCITY: ¿Qué estrategia está siguiendo el Ayuntamiento de L’Hospitalet para convertirse en una Ciudad Inteligente?
Núria Marín: Cada ciudad tiene su química propia, su alma que la hace especial y diferente, y ese ADN diferenciador es el que debemos poner en valor para conseguir el éxito en el proceso de construcción de las ciudades inteligentes. La igualdad de oportunidades y la inclusión social es lo que nos permite crear ciudades más habitables y más justas.
En L’Hospitalet hemos acotado nuestro ámbito de acción a un territorio con sus realidades y complejidades. Esto nos ha permitido crear un laboratorio de innovación donde desarrollar y probar proyectos piloto, para luego aplicarlos al resto de la ciudad. Es nuestro Distrito Social que, vinculado al Distrito Económico y al Distrito Cultural, ha de ser el motor de transformación que permitirá la retención y la captación de talento.
ESMARTCITY: Actualmente, ¿cómo se encuentra la evolución de las Ciudades Inteligentes en España con respecto al resto de Europa? ¿Qué papel ha jugado la RECI en esa evolución en los últimos años?
Núria Marín: Las ciudades en su conjunto no pueden compararse unas con otras. Madrid o Barcelona juegan en una liga diferente al resto. Lo importante es que los municipios tomen conciencia y sepan aprovechar la oportunidad que representa el momento de transformación que vivimos. La RECI ha servido para compartir sus proyectos y debe convertirse en el modelo de cooperación necesario para que esas experiencias se puedan implantar en el resto de territorios.