Un nuevo reglamento europeo animará a los fabricantes de automóviles a invertir en tecnologías de reducción de emisiones de CO2.

Un nuevo reglamento europeo animará a los fabricantes de automóviles a invertir en tecnologías de reducción de CO2, dentro del enfoque global de la UE para combatir el cambio climático.

La UE se ha comprometido a conseguir tres objetivos clave de aquí a 2020: reducir un 20% las emisiones de gases de efecto invernadero, obtener el 20% de la energía de fuentes renovables y recortar el consumo de energía en un 20%.

Alcanzar esos objetivos exige actuar en muchos frentes. Por ejemplo, los fabricantes de automóviles tienen que lograr que a partir de 2015 las emisiones de CO2 de los turismos nuevos sean inferiores en una quinta parte a los niveles de 2007. Hoy día, en la UE los automóviles son responsables del 12% de las emisiones de CO2, principal gas de efecto invernadero.

Por otra parte, un nuevo reglamento anima a los fabricantes de automóviles a invertir en tecnologías innovadoras de reducción de emisiones y obtener las certificaciones correspondientes. Para acogerse a esta medida, las tecnologías innovadoras deben permitir una reducción significativa de CO2 y no se habrán tenido previamente en cuenta a la hora de establecer el nivel de emisiones.

Además, estas tecnologías deben mejorar la propulsión del vehículo o su consumo de energía, sin afectar a su seguridad (por ejemplo, unos paneles solares que conviertan la luz del sol en energía eléctrica podrían acogerse a la medida, pero no los equipos de sonido de bajo consumo para automóviles).

Otras actuaciones:

Las medidas destinadas a los automóviles forman parte de un enfoque global de la UE para combatir el cambio climático, que también incluye estas actuaciones:

 
 
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