El concepto de cambio climático hace referencia a la variación global del clima de la Tierra, debida a causas naturales y a la acción de los humanos. Afecta a la totalidad de parámetros climáticos: temperatura, precipitaciones, nubosidad, etc. Actualmente, existe un consenso científico sobre el impacto negativo de nuestro modo de producción y consumo energético en el clima global.

El cambio climático no solo es un fenómeno ambiental, sino que tiene profundas consecuencias económicas y sociales: una futura escasez de agua potable, el aumento de fenómenos atmosféricos adversos, como olas de calor, sequías, tormentas e inundaciones; así como un aumento en los índices de mortalidad. Entre las medidas que están tomando las ciudades para combatir el cambio climático, se encuentra la reducción de emisiones contaminantes a la atmósfera, el ahorro de agua y energía, fomento del reciclaje y la economía circular, impulso a la movilidad sostenible y aumento de zonas verdes urbanas.