El Gobierno vasco ha presentado el proyecto para ampliar la red IoT pública de Euskadi, desarrollada por la sociedad pública Itelazpi, cuyo objetivo es conectar más de 300.000 sensores para 2028. Esta red de comunicaciones inalámbrica permite recopilar información para una toma de decisiones basada en datos que facilite el desarrollo de proyectos de smart city.
El objetivo del proyecto es el despliegue masivo para lograr una red IoT pública integral, de alta densidad y equilibrada entre las tres provincias. Para 2028, se prevé alcanzar una cobertura de red del 90% con más de 300.000 sensores conectados y 500 puntos de cobertura.
De esta manera, se busca impulsar la digitalización de los procesos de gestión pública a todos los niveles de la administración vasca para una mayor eficiencia a través de una infraestructura de comunicación pública que dé respuesta a las necesidades de las administraciones y el conjunto de la sociedad.
Casos de uso de la red IoT pública
El Ejecutivo vasco está colaborando con 36 municipios y 15 entidades públicas en diferentes casos de uso ya en desarrollo. Entre ellos, el sistema de detección temprana de incendios en contendedores en Getxo, el control de llenado de contenedores y el despliegue de contadores de agua inteligentes de los consorcios de agua, que permite tanto la lectura a distancia de los contadores como controlar todo el ciclo del agua y detectar posibles fugas.
Otros casos de uso potenciales son el control de las zonas de bajas emisiones, medidas de eficiencia energética, ruido o calidad del aire; la gestión inteligente del alumbrado, la optimización de rutas de recogida de basura, el control de aparcamiento para el redireccionamiento del tráfico, la detección de malos usos o el control de tiempo de estacionamiento, el control de zonas y elementos inundables, el control de accesos, aforos e influencia de personas, o el mantenimiento de infraestructuras urbanas.
Sensores, antenas y software
La red IoT pública de Euskadi está compuesta por sensores, que generan y transmiten los datos; una red de antenas, que cuenta con la doble función de proporcionar cobertura y transportar la información; y el software, que recibe los datos y permite su explotación.
Itelazpi proporciona a las administraciones públicas la red que da cobertura al proyecto mediante el despliegue de nuevos puntos de cobertura (antenas) que permiten transportar los datos para que estos lleguen a su destino final. Por su parte, las entidades públicas son las encargadas de la instalación de los sensores y del desarrollo del software, según sus necesidades.
La estrategia de implantación de la red IoT, basada en tecnología LoRaWan, comenzó a desplegarse en 2018. A lo largo de 2020 se realizaron varios proyectos piloto y, en 2021, se inició un despliegue de red mayor. Actualmente, cuenta con una cobertura del 68%, con 210.654 sensores conectados y 362 puntos de cobertura. De ellos, 39 se ubican en Araba, 176 en Bizkaia y 147 en Gipuzkoa.
El Gobierno vasco anima a todas las instituciones del territorio a adherirse a la red IoT para facilitar la inclusión de casos de uso en sus planes de transformación digital, partiendo de la infraestructura desplegada.