Dos nuevas líneas de autobuses cero emisiones y gratuitas para los viajeros, una aplicación móvil municipal con información sobre calidad del aire y posibilidad de reservar aparcamientos y 200 millones de euros en ayudas a repartir en los próximos cuatro años son algunas de las medidas de la estrategia de sostenibilidad ambiental Madrid 360, que sustituirá a Madrid Central a partir del próximo año, presentada este lunes por el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida. El nuevo plan vuelve a dejar circular por el distrito centro a los vehículos con etiqueta C si van ocupados por al menos dos personas.
Según explicó el alcalde, el plan elaborado en este verano tiene previsto poner en marcha dos líneas de autobuses con vehículos 100% limpios que serán gratuitas para todos los viajeros con el fin de que se muevan por el distrito centro y adyacentes. La Línea Cero 1 atravesará Centro con cabeceras situadas en San Bernardo y Puerta de Toledo. La Línea Cero 2, que recorrerá toda la Gran Vía, las tendrá ubicadas en Moncloa (distrito de Moncloa-Aravaca) y en la plaza de Felipe II (Salamanca). Además, se habilitará otra línea perimetral de bajas emisiones alrededor del distrito centro que sí será de pago.
Otra de las medidas anunciadas este lunes es que la EMT pasará a tener en 2027 un total de 668 autobuses eléctricos, frente a los 68 que dispone en la actualidad, del total de 2.000 vehículos con los que cuenta el servicio municipal de autobuses. Según este plan, en 2023 habrá en circulación 200 autobuses totalmente eléctricos y en 2027 se sumarán 400 más.
App móvil y ayudas para renovar el parque móvil
En línea con el concepto de smart city, el Ayuntamiento de Madrid creará una aplicación municipal desde donde se puedan reservar aparcamientos para particulares y empresas de mercancías, donde se consulten las rutas más eficientes para evitar atascos y contaminar menos y donde aparezcan todos los parámetros de la calidad del aire y las posibles restricciones en episodios de alta contaminación.
Para particulares, la Estrategia 360 incluye el lanzamiento de una línea de ayudas para que puedan renovar sus vehículos. En total se dispondrá de 25 millones de euros anuales para privados que cambien su vehículo sin distintivo por otro CERO, ECO o C. Otros 10 millones anuales se destinarán a promover la renovación de vehículos de mercancías. También se crearán centros logísticos en Centro y para la distribución de la última milla con vehículos limpios.
Además, parte de los aparcamientos de la EMT de Centro se utilizarán como centros de distribución urbana de mercancías (se aparca el vehículo contaminante y se distribuye con uno más ecológico). Respecto al taxi, se incorporará otra línea de ayudas de cinco millones de euros al año para promover la renovación de flotas del sector. Otros cinco millones se destinarán al cambio de vehículos de autobuses discrecionales.
Aparcamientos disuasorios y puntos de recarga
El alcalde de la ciudad ha explicado que se incluye como objetivo la construcción de 15.000 plazas de aparcamiento. De estas plazas, 10.000 estarán en 14 aparcamientos disuasorios y otras 5.000 plazas serán de rotación y residentes.
Otros medios de transporte que se impulsarán serán la bicicleta, con la expansión de BiciMAD dentro y fuera de la M-30 y la creación de nuevos carriles bici y ciclocarriles; las motos eléctricas, para lo que se duplicarán las plazas de aparcamiento hasta alcanzar las 21.000 plazas en los próximos cuatro años; y el carsharing eléctrico, así como la compra y alquiler de eléctricos, impulsando la red de recarga rápida de acceso público. También está previsto destinar cinco millones de euros para instalar puntos de carga en aparcamientos de residentes y oficinas.
Los vehículos C vuelven al centro y los A estarán prohibidos en 2025
Frente a estas medidas, la estrategia Madrid 360 vuelve a dejar circular dentro del perímetro de Madrid Central a los vehículos con el distintivo C de la DGT cuando vayan con al menos dos ocupantes. Estos vehículos son los turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas a partir de enero de 2006 y diésel a partir de 2014. Vehículos de más de 8 plazas y de transporte de mercancías, tanto de gasolina como de diésel, matriculados a partir de 2014.
Los vehículos con etiqueta C tenían restringido el acceso a toda la zona de emisiones bajas de la ciudad desde la entrada en vigor de Madrid Central, el plan que puso en marcha la anterior corporación municipal. La estrategia incluye la reducción gradual del espacio de la circulación a los vehículos más contaminantes de tal forma que, a partir del próximo uno de enero, los vehículos A (los que no llevan etiqueta) no podrán aparcar dentro de la almendra central salvo los residentes, que solo podrán hacerlo en su barrio. Además, desde enero de 2022, estos vehículos no podrán acceder ni circular dentro de la M-30, si son de conductores no residentes en la ciudad.
Un año después, en enero de 2023, tampoco podrán circular los vehículos A en la M-30 y, a partir de 2024, ningún vehículo A de fuera de Madrid podrá circular por todo el término municipal. Esta medida supone, según la actual corporación municipal, una reducción de hasta 618 toneladas de NOx anuales, una cifra que multiplica por cinco la reducción de emisiones que se estimaba para Madrid Central (112 toneladas). Finalmente, en 2025 ningún vehículo con distintivo A, residente o no en Madrid, podrá circular por toda la ciudad.