La ciudad israelí de Haifa detecta una grave pérdida de agua utilizando una solución denominada iDroloc

Obras en la vía pública de Haifa (Israel) que ha conseguido detectar una grave fuga de agua utilizando la tecnología.

La tecnología aplicada a los servicios básicos de ciudad es capaz de resolver problemas que hasta ahora, era complicado detectar. La operadora israelí Mei Carmel, responsable de la gestión de redes de agua potable y drenaje de la ciudad de Haifa en Israel, ha podido detectar una fuga severa utilizando la solución iDroloc de Suez que, mediante métodos tradicionales, no había podido ser localizada.

Obras en la vía pública de Haifa (Israel) que ha conseguido detectar una grave fuga de agua utilizando la tecnología.

La fuga, situada bajo una de las vías con más tránsito de Haifa, ha supuesto durante estos dos años una pérdida de 450m3 al día y 80.000 euros al año de coste del agua. Según las fuentes de Mei Carmel, se estima que la cantidad total de agua que se ha perdido es de 800.000 metros cúbicos, el equivalente a 800 piscinas olímpicas. Además durante este tiempo, la fuga también había ido arrastrando terreno, generando una cavidad de grandes dimensiones que habría podido provocar en cualquier momento un colapso del suelo.

Reducción del nivel de pérdidas

iDroloc es un sistema de detección de fugas mediante helio sin interrupción de la prestación del servicio de agua. Permite localizar fugas de agua tanto en tuberías de largo recorrido y gran diámetro, como en pequeñas tuberías de distribución y acometidas dentro del casco urbano. Las roturas o fugas en la red de distribución de agua suponen un alto coste económico y un gran impacto medioambiental. Una localización precisa y rápida de estas fugas es fundamental para reducir las pérdidas y optimizar la gestión del agua.

En este contexto, Mei Carmel ha contratado el servicio de búsqueda de fugas de Suez durante los próximos cuatro años para su red de distribución. Y, especialmente, en las tuberías plásticas para las cuales los métodos acústicos tradicionales presentan limitaciones. Israel se ubica en una zona árida, razón por la cual siempre ha sido un país a la vanguardia en el desarrollo e implantación de tecnologías relacionadas con el agua.

Haifa dispone de una de las redes de agua más complejas, con más de 100 zonas de presión distintas. La red consta de 600 km de tuberías, 40 depósitos y 14 estaciones de bombeo. Mei Carmel ha reducido su nivel de pérdidas de agua desde el 20 % en el momento de iniciar el programa de pérdidas de agua hasta el 8,5 % a finales de 2016: su objetivo es alcanzar un nivel de pérdidas del 5 % en los próximos dos años.

 
 
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