Ferrovial Servicios ha desarrollado un área de Ciudades Inteligentes con soluciones que está implemetando en varios países, entre ellos España y, sobre todo, Reino Unido, en las ciudades de Birmingham y Sheffield. En este artículo entrevistamos a Enrique Sánchez Nuevo, Director de Ciudades de Ferrovial Servicios.
ESMARTCITY: Una de las características de las Ciudades Inteligentes es la incorporación de tecnologías que aporten un valor añadido ¿Cuáles son las principales barreras para el despliegue e incorporación de TIC en las ciudades?
Enrique Sánchez Nuevo: En Ferrovial creemos que el uso de tecnología en las ciudades es clave y no vemos obstáculos que puedan parar ese inevitable desarrollo. No obstante, quizás cabría hablar de dos limitaciones, una de corte financiero y la otra operativa.
La barrera financiera no es más que la capacidad de invertir en TIC que actualmente tienen los propios ayuntamientos. En Ferrovial creemos que dicha limitación se salvaría extendiendo los plazos de contratación de los servicios, de tal forma que los operadores como nosotros, pudiéramos acometer las inversiones necesarias para modernizar la infraestructura digital de las ciudades. Dicha inversión redundaría, a medio plazo, en una disminución del coste del servicio y una mejora del mismo.
La segunda barrera al despliegue de las TIC es operativa y tiene que ver con la fragmentación del mapa de servicios que actualmente tienen las ciudades. Coexisten en una urbe decenas de empresas de servicios, cada una con sistemas y tecnologías diferentes, lo que dificulta una coherente planificación tecnológica en la ciudad. Con una adecuada integración y reordenación de empresas se podría avanzar sustancialmente en el desarrollo de las TIC en la ciudad.
ESMARTCITY: En la coyuntura económica actual ¿Contribuirá el desarrollo de las Smart Cities a la creación de riqueza y a un cambio del modelo productivo?
Enrique Sánchez Nuevo: Sin duda. Actualmente hay recursos ineficientes e infrautilizados en la gestión de las ciudades. El modelo que propugnamos desde Ferrovial busca optimizar el uso de esos recursos, ya sean humanos o técnicos, liberando potencial para actividades de valor añadido a la ciudad o incluso la creación de nuevos servicios y prestaciones al ciudadano. Mirándolo desde un prisma macroeconómico a largo plazo, se trata de transferir recursos desde actividades básicas de operación de baja cualificación a actividades más relacionadas con el desarrollo tecnológico y con mayor exigencia y especialización profesional.
En otras palabras, y a modo de ejemplo simple, en un futuro harían falta menos operarios limpiando la via pública pero será necesaria mayor fuerza laboral cualificada para fabricar sensores y tecnología. Efectivamente, es un cambio de modelo productivo, que requiere también un reajuste de las políticas educativas y formativas, de la política relacionada con I+D, pero creemos que es el modelo de desarrollo al que debe aspirar nuestro país.
ESMARTCITY: ¿Consideras que el ciudadano asume un nuevo rol en este concepto, también nuevo, de Ciudad?
Enrique Sánchez Nuevo: El ciudadano, y aquí hablo yo también en primera persona, no ha sido históricamente muy partícipe de lo que la ciudad decide y ofrece. Creemos que esto es un error. Hoy en día, las tecnologías facilitan que cualquier persona pueda interactuar en tiempo real. De esa forma, el ciudadano pueda estar informado online sobre las principales cuestiones de la ciudad que le afectan: tráfico, seguridad, medioambiente, ruidos, eventos, incidencias, administración electrónica, etc.
Además, el ciudadano es una fuente de información permanente tanto para el ayuntamiento como para un operador de servicios. Hoy en dia estamos todos geolocalizados, nuestro dispositivo móvil arroja una gran cantidad de información útil. ¿Por qué no utilizarla? ¿Por qué depender de un inspector municipal para arreglar un bache en mi calle si yo mismo puedo reportarlo y “exigir” una respuesta en un tiempo determinado?
Se puede primar e incentivar la participación ciudadana. Es un sistema mucho más abierto, más participativo. También más exigente para los que prestamos servicios, pero en Ferrovial estamos dispuestos a apostar por la competitividad.
En definitiva, y salvando por supuesto las limitaciones de privacidad que la ley garantiza, el ciudadano debe ser parte activa y protagonista de este ecosistema. Dicho de otro modo, no existe concepto de Ciudad Inteligente si el ciudadano no es el epicentro de la gestión de la propia ciudad.
ESMARTCITY: Además del ciudadano, ¿qué otros actores participan en la evolución hacia la Smart City y qué relaciones se establecen (o deben establecerse) entre ellos?
Enrique Sánchez Nuevo: En ocasiones he hecho referencia al termino “humildad colectiva” para referirme al hecho de que ningún actor por si solo es capaz de impulsar el concepto de Ciudad Inteligente. Por el contrario, es necesaria la conjunción de esfuerzos, capacidades y determinación de las partes involucradas en este cambio de modelo.
Cuando hablo de actores, me refiero en particular: A los ayuntamientos como los decisores e impulsores del modelo, a las empresas tecnológicas como habilitadores de soluciones e “intelecto” para la ciudad, a las empresas industriales de servicios como Ferrovial como operadores en el terreno, incluso al mundo académico como elemento potenciador de la investigación y el conocimiento dentro del ámbito urbano o también, por qué no, al sector de los medios de comunicación como canal de información, creadores de opinión y captadores de la sensibilidad del ciudadano.
Ninguno de nosotros, de forma aislada, por muy grandes o importantes que puedan o podamos ser las compañías o los ayuntamientos, avanzaremos en este proceso de transformación sin la compañía y la colaboración de los otros.
ESMARTCITY: En este nuevo paradigma surgen conceptos como el “Ciy Partner” ¿a qué hace referencia y cuál es su función?
Enrique Sánchez Nuevo: En Ferrovial, como gestores de infraestructuras, creemos que la Ciudad, vista de una forma global, es posiblemente la infraestructura más compleja y dinámica que existe. Mucho más que una autopista, un puente, un puerto o incluso un aeropuerto. Por ello pensamos que las ciudades no deberían gestionarse bajo un esquema cortoplacista como el actual, fragmentado además en multitud de empresas prestando servicios en la ciudad pero sin conexión alguna entre ellas.
Creemos en la coordinación, la integración y la visión holística de la ciudad. Por ello pensamos que la ciudad necesita de un socio, un City Partner, que sea el gestor de la ciudad, que sea el ejecutor de la visión estratégica y las directrices políticas marcadas desde el propio Ayuntamiento.
¿Qué beneficio obtiene un ayuntamiento negociando diferentes convenios, diferentes plazos, diferentes precios con diferentes compañías ? creemos que ninguno. Elegir un socio adecuado, que no ha de ser una sola empresa, sino probablemente un consorcio formado por las mejores en el ámbito de servicios/ingeniería y en el ámbito tecnológico, parece lo mas apropiado para vertebrar un desarrollo de la ciudad.
ESMARTCITY: En cuanto al ámbito normativo, ¿qué reformas son necesarias en la Ley de Bases de Régimen local para poder acercarnos a ese nuevo modelo de Ciudad Inteligente al que hacéis referencia?
Enrique Sánchez Nuevo: La reforma de la LBRL está en marcha y creemos que el Gobierno, junto con la FEMP está direccionando dicha reforma en el camino correcto, esto es, en la búsqueda de la eficiencia en la prestación de servicios públicos en ciudades.
España tiene más de ocho mil municipios, todos ellos con su propia capacidad de contratación de servicios. Países en los que operamos y conocemos bien, como Reino Unido, tienen solo 433 “gobiernos locales” a efectos de contratación, es decir, 20 veces menos que España aún siendo un país con mayor población que la nuestra. Esto es así porque en Reino Unido hace años que se produjo una reordenación del mapa administrativo en lo que afecta a los servicios a las ciudades en orden a buscar una racionalidad en el coste.
Hasta donde sabemos, la reforma va en esta línea, buscando agrupación en municipios menores de veinte mil habitantes cuyos ratios de eficiencia no sean buenos, subiendo estas competencias a las diputaciones. La idea parece acertada por coherente. Esperemos que el desarrollo legislativo final sea el adecuado. Desde Ferrovial estamos abiertos a colaborar con la Administración General del Estado para la definición de estándares y el análisis técnico de los servicios municipales.
ESMARTCITY: Desde la experiencia de Ferrovial, ¿Qué diferencias hay entre el modelo anglosajón de implantación de Ciudades Inteligentes y cuál es su capacidad diferencial frente al nuestro?
Enrique Sánchez Nuevo: En líneas generales, el mundo anglosajón está mucho más avanzado que España en materia de PPP, Public Private Partnership o CPP. Nos llevan años de ventaja y eso se nota, especialmente en el ámbito municipal. Allí no se discute ya sobre la conveniencia de integrar servicios ni sobre la extensión de los plazos. Se da por supuesto que un mayor volumen y un mayor plazo para el operador privado posibilitan una capacidad de inversión que, de otra manera, el Ayuntamiento no podría acometer.
También se está mucho más concienciado en medir la calidad por indicadores que en la exigencia de medios a los contratos. Importa el output, no el input. Tal ha sido el caso en los contratos que hemos ganado en las ciudades de Birmingham y Sheffield, la segunda y la quinta ciudad del Reino Unido, con un millón y medio millón de habitantes respectivamente. Tener contratos a 25 años con un volumen de operación de 2,5 billones de libras, como es el caso de Birmingham, nos ha posibilitado acometer un plan de inversiones en la ciudad de más de 400 millones de libras en mejorar el estado de las infraestructuras de la ciudad. Es un caso único en Europa que está transformando la ciudad.
Tal es el éxito del modelo en estos casos que incluso se podría decir que es ajeno a las corrientes políticas del propio Ayuntamiento. En Birmingham, el contrato se adjudicó bajo mandato conservador y desde hace algo más de un año el gobierno municipal pasó a ser laborista; lejos de ponerse en duda el modelo, se está buscando potenciarlo aún más.
ESMARTCITY: Finalmente, ¿Qué perspectivas de futuro se plantean en cuanto al desarrollo de las Smart Cities en España?
En Ferrovial Servicios pensamos que Ciudades Inteligentes no es un “producto” nuevo, ni tecnología por tecnología. Creemos que es un nuevo modelo de gestión de las ciudades donde se combine de forma optima la eficiencia económica con la calidad en los servicios. Todo ello vertebrado por una arquitectura tecnológica nueva y en el marco de un modelo de abierta colaboración publico-privada, con el ciudadano en el epicentro del sistema.
España está siendo un país ciertamente avanzado en la corriente de Ciudades Inteligentes. Hay ciudades en España que están siendo referente mundial en esta materia. Ahora lo que toca es concretar acciones y medidas en las ciudades que hagan tangible el concepto al ciudadano, mucho más allá de pruebas piloto y soluciones parciales. Nosotros confiamos en que los actuales mandatarios municipales vayan enfocando sus directrices estratégicas hacia este modelo, y Ferrovial Servicios estará siempre como un socio para el desarrollo de este nuevo paradigma. Somos optimistas, este es el modelo de futuro en las Ciudades.