El Gobierno de las Islas Baleares ha lanzado la nueva convocatoria de ayudas para impulsar la digitalización del ciclo urbano del agua en municipios de menos de 20.000 habitantes. La línea de subvenciones, dotada con 1,3 millones de euros, forma parte del PERTE de digitalización del ciclo del agua dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) y está financiada con fondos europeos NextGenerationEU.
El objetivo de la convocatoria es modernizar la gestión del agua mediante inversiones en sistemas de control, monitorización y telemedida, que permitan reducir pérdidas, detectar fugas, optimizar el consumo energético y mejorar la eficiencia de las redes municipales. Podrán acceder ayuntamientos, mancomunidades, consorcios locales y otras entidades del sector público que gestionen servicios de abastecimiento y saneamiento en municipios pequeños.
Plazo para presentar solicitudes
El plazo para presentar solicitudes será de un mes a partir de la publicación en el BOIB, y el trámite se realizará por vía telemática. Las actuaciones subvencionables deberán haberse iniciado tras el 1 de febrero de 2020 y finalizar antes del 30 de junio de 2026.
La convocatoria se enmarca dentro del apoyo general del Gobierno balear a los municipios en materia de agua, que en 2025 cuenta con una partida de 57,4 millones de euros de fondos ITS destinada a proyectos municipales vinculados al ciclo del agua, con el objetivo de mejorar la eficiencia de la gestión y avanzar en actuaciones planificadas.
En el acto de presentación de las ayudas, se presentó el proyecto de la calle Sant Josep en Es Castell, que cuenta con un presupuesto total de 1.066.503 euros, financiado con 548.000 euros de fondos propios del Ayuntamiento y 518.000 euros de fondos ITS. La actuación incluye la construcción de un nuevo colector de pluviales para mejorar el drenaje urbano, reducir incidencias en episodios de lluvia intensa y evitar que sedimentos y residuos lleguen a Calesfonts y al Port de Maó.
El proyecto refuerza el sistema de drenaje municipal y contribuye a la mejora de la infraestructura urbana y a la protección del entorno litoral. La actuación complementa el depósito de tormentas construido en la primera fase, aumentando la capacidad de recogida de aguas pluviales, mejorando la seguridad de la calzada y permitiendo que los residuos se decanten y depuren antes de su salida al mar.