El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado el despliegue de 4.800 bicicletas eléctricas por toda la ciudad, para incrementar la sostenibilidad medioambiental, mejorar y diversificar la oferta de transportes, y reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera. Estarán repartidas en dos ámbitos diferenciados: el interior de la M-30, con un máximo de 2.000 vehículos; y su exterior, con 2.800.
Ante la situación de nueva normalidad, el área de Medio Ambiente y Movilidad del consistorio madrileño, dirigido por Borja Carabante, ha publicado este miércoles la resolución para conceder autorizaciones temporales para el arrendamiento de bicicletas eléctricas sin base fija a través de diferentes operadores. Así, el número total de estos vehículos disponibles -incluyendo BiciMAD, que cuenta con 2.496-, será tres veces superior a la cifra existente a finales de 2019.
La cifra máxima de bicicletas autorizadas para empresas está determinada en el artículo 85 de la actual Ordenanza de Movilidad Sostenible (OMS), que establece que los vehículos de movilidad urbana (VMU) ligados a una actividad de explotación económica no podrán ocupar más del 50% de las plazas existentes en una reserva de estacionamiento, y Madrid dispone de un total de 9.600 plazas. El límite inicial autorizable garantiza la seguridad vial y asegura el libre mercado y la libre competencia efectiva.
Además, se podrá incrementar o disminuir dependiendo de la demanda y el uso real de los vehículos. En este sentido, los autorizados deberán facilitar al Ayuntamiento de Madrid información en tiempo real sobre la geolocalización de las bicicletas, a través de conectores automáticos, servicios web o similares; así como acceso al cuadro de mando para evaluar el uso medio.
Presentación de solicitudes
Desde el día después de la publicación de la resolución, se conceden 30 días hábiles para que los interesados presenten su solicitud. La autorización demanial temporal y gratuita se concederá mediante procedimiento de concurrencia pública competitiva hasta el 31 de agosto de 2021, y será prorrogable una vez más por seis meses adicionales en función de la evolución de la demanda.
El permiso entrará en vigor el día siguiente de la notificación de su concesión. Una vez que la empresa disponga de la autorización, deberá iniciar un primer despliegue de al menos el 50% de su flota hasta el 1 de septiembre de 2020, para situar el resto de bicicletas en un plazo máximo de dos meses, es decir, hasta el 1 de noviembre del mismo año.
Asimismo, el consistorio podrá revocar las autorizaciones si los adjudicatarios no cumplen con las condiciones jurídicas y técnicas establecidas en la resolución, por motivos de seguridad, o por no seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias en cuanto a higiene y distanciamiento social. Entre las obligaciones, se encuentra la de garantizar la accesibilidad universal, situar los vehículos en reservas específicas de estacionamiento, desinfectar las bicicletas y exigir el uso de guantes a los usuarios.
Esta iniciativa se enmarca en la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 y se adopta en paralelo al desarrollo de la ampliación de BiciMAD, que inaugurará 50 nuevas estaciones en 13 distritos de Madrid antes de finalizar el año.