La Comisión Europea ha presentado esta semana el Paquete de Automoción para apoyar los esfuerzos del sector en la transición hacia una movilidad limpia. Se trata de un paquete de medidas que mantiene una sólida señal de mercado para los vehículos de cero emisiones, a la vez que otorga al sector mayor flexibilidad para alcanzar los objetivos de CO2 y apoya los vehículos y baterías fabricados en la Unión Europea.
La Comisión Europea destaca que este paquete de medidas establece un marco político para garantizar la neutralidad climática y la independencia estratégica para 2050, ofreciendo al mismo tiempo mayor flexibilidad a los fabricantes. Además, responde a las peticiones de la industria de la UE de simplificar las normas.
Transición del sector automovilístico hacia la movilidad limpia
El Paquete de Automoción aborda tanto la oferta como la demanda de la transición del sector automovilístico. Por el lado de la oferta, presenta una revisión de las normas vigentes sobre emisiones de CO2 para turismos y furgonetas, y una modificación específica de las normas para vehículos pesados. Por el lado de la demanda, propone una iniciativa para descarbonizar los vehículos corporativos con objetivos nacionales vinculantes para vehículos de cero emisiones y de bajas emisiones.
Ahora, los estándares de CO2 ofrecen mayor flexibilidad para apoyar a la industria y mejorar la neutralidad tecnológica, al tiempo que ofrecen previsibilidad a los fabricantes y mantienen una señal clara del mercado hacia la electrificación.
Se establece que, a partir de 2035, los fabricantes de automóviles deberán cumplir con un objetivo de reducción del 90% de las emisiones del tubo de escape, mientras que el 10% restante de las emisiones deberán compensarse mediante el uso de acero con bajo contenido de carbono fabricado en la Unión Europea o mediante electrocombustibles y biocombustibles.
Esto permitirá que los híbridos enchufables, los extensores de autonomía, los híbridos suaves y los vehículos con motor de combustión interna sigan teniendo un papel que desempeñar más allá de 2035, además de los vehículos totalmente eléctricos y los de hidrógeno.
Vehículos eléctricos pequeños
Además, el paquete de medidas también determina que, antes de 2035, los fabricantes de automóviles podrán beneficiarse de supercréditos para coches eléctricos pequeños y asequibles fabricados en la Unión Europea, lo que incentivará la comercialización de más modelos de vehículos eléctricos pequeños.
Para el objetivo de 2030 para coches y furgonetas, se introduce una mayor flexibilidad al permitir la concesión de préstamos para el período 2030-2032. Se concede una mayor flexibilidad para el segmento de las furgonetas, donde la adopción de vehículos eléctricos ha sido estructuralmente más difícil, con una reducción del objetivo de CO2 para furgonetas de 2030 del 50% al 40%. Y también la Comisión Europea propone una modificación específica de las normas sobre emisiones de CO2 para vehículos pesados con una flexibilidad que facilite el cumplimiento de los objetivos para 2030.
En cuanto a los vehículos corporativos, se establecen objetivos obligatorios a nivel de los Estados miembros para impulsar la adopción de vehículos de cero emisiones y de bajas emisiones por parte de las grandes empresas.
Programa Battery Booster
Por su parte, el programa Battery Booster acelerará el desarrollo de una cadena de valor de baterías íntegramente fabricada en la UE. En el marco del programa, 1.500 millones de euros apoyarán a los productores europeos de celdas de batería mediante préstamos sin intereses.
Y otras medidas políticas específicas apoyarán las inversiones, crearán una cadena de valor europea de baterías y fomentarán la innovación y la coordinación entre los Estados miembros de la UE. Estas medidas mejorarán la competitividad del sector en cuanto a costes, asegurarán las cadenas de suministro ascendentes y apoyarán la producción sostenible y resiliente en la UE.
Programa Ómnibus
Por otro lado, el programa Ómnibus Automotriz aliviará la carga administrativa y reducirá los costes para los fabricantes europeos. Entre otras cosas, propone reducir la cantidad de legislación secundaria que se adoptará en los próximos años y agilizar las pruebas para las nuevas furgonetas de pasajeros y camiones.
Además, el programa Ómnibus también introduce una nueva categoría de vehículos en el marco de la iniciativa de Vehículos Pequeños y Asequibles, que abarca los vehículos eléctricos de hasta 4,2 metros de longitud. Esto permitirá a los países de la UE y a las autoridades locales desarrollar incentivos específicos que estimulen la demanda de vehículos eléctricos pequeños fabricados en la UE.
