La Consejería de Administración Pública de Extremadura ha centrado su actuación del próximo año en la mejora tecnológica de los servicios de la Administración y también en la optimización y mejora de la relación con los ciudadanos, según ha declarado su titular, Pedro Tomás Nevado-Batalla.
El Consejero presentó las propuestas tecnológicas del Gobierno, entre las que se incluye mejorar la plataforma tecnológica del 112, cuya necesidad de reforma se ha visto con claridad en el dispositivo desplegado para las recientes inundaciones, que pese a “que ha funcionado muy bien”, en palabras del Consejero, es necesario mejorar.
En este ámbito, se plantea crear una Plataforma de rastreo de llamadas para saber dónde puede situarse una persona en situación de emergencia, simplificar el sistema operativo de gestión sanitaria, y mejorar la identificación de las denominadas llamadas “maliciosas”, planteando en este último caso, la creación de una Ley que contemple infracciones y sanciones como consecuencia del mal uso del 112.
En el terreno de las emergencias, se actuaría sobre cuatro ejes principales. La ampliación del servicio de atención a víctimas de violencia de género, coordinándose con la plataforma 016 y Cruz Roja, a ello se sumaría un servicio de alerta temprana en el caso de desaparición de menores, que se active con mayor agilidad y se coordine con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, e incluso con los propios ciudadanos.
También se está estudiando un aplicativo de emergencias destinado a discapacitados auditivos, para que su discapacidad no les impida acceder a este servicio, junto con la implantación de un aplicativo de alerta temprana que actuaría desde dos ámbitos: de forma interna, para suministrar datos e información relevante a los dispositivos de emergencias, y de forma externa enfocada hacia al ciudadano, que podría canalizarse a través de sms, páginas web o una frecuencia de radio.
A juicio de Nevado-Batalla, todas estas medidas redundarán en “una mejor relación entre los ciudadanos y la Administración”, para ello ha puesto en valor la decisión del Gobierno regional de elevar un segundo nodo a la nube, “que se ha manifestado como acertado porque ese es el futuro” y ha dicho que se situará en Badajoz, que era “la única ciudad que estaba fuera de los retos del Gobierno en materia tecnológica”.