Metropolitan Manila Development Authority ha adjudicado a Indra, en consorcio con la empresa filipina Meralco Industrial Engineering Services Corporation (Miescor), la renovación del sistema de gestión de tráfico urbano de Metro Manila, la principal área metropolitana del país. El objetivo es automatizar y optimizar al máximo la gestión y las instalaciones de ingeniería de tráfico para mejorar la movilidad en la metrópoli, en la que el crecimiento de la población y del parque automovilístico, así como de la actividad industrial y comercial, está impactando negativamente.
El proyecto incluye la creación y equipamiento del centro de control para todo el tráfico urbano de la ciudad que permitirá gestionar más de 500 intersecciones; la renovación de 85 cruces semafóricos en el centro y un sistema de vigilancia dotado con 25 cámaras de control de tráfico.
La solución, basada en el sistema Hermes de Indra, permitirá el seguimiento continuo de la evolución del tráfico y la monitorización en tiempo real de los diferentes subsistemas de control, así como el análisis y la consolidación de la información para la toma de decisiones sobre movilidad. De ese modo, hará posible incrementar la seguridad, optimizar el flujo de vehículos y reducir los tiempos de circulación, los costes y el impacto medioambiental, algo de suma importancia en una de las metrópolis con mayor densidad de población del mundo y más de 11 millones de habitantes.
Mejora del peaje en la autopista North Luzon Expressway
Además de éste, Indra se ha adjudicado otro contrato en Filipinas para la renovación del sistema de peaje de la autopista Manila North Luzon Expressway (NLEX). El importe conjunto de ambos proyectos asciende a los 10,4 millones de euros.
Su labor será mejorar el total de 166 vías de peaje, que incluyen vías manuales, de peaje electrónico, mixtas y automáticas, así como la nueva tecnología para el centro de control, el sistema de backoffice y el sistema de supervisión de vídeo de todas las vías. El nuevo sistema de peaje será diseñado de forma que se adapte a las necesidades específicas de los conductores particulares y de los grupos de transporte, al permitir una mayor variedad de opciones de pago. La nueva tecnología agilizará las transacciones en los peajes y reducirá las colas hasta hacerlas desaparecer prácticamente.