El proyecto europeo Energy ECS se ha desarrollado durante tres años y medio con el objetivo de acelerar la digitalización y descarbonización de los sistemas de movilidad y energía mediante tecnologías avanzadas en electrónica, componentes y sistemas (ECS), contribuyendo a potenciar la innovación y las capacidades de fabricación europeas. El Servicio de Información Comunitario sobre Investigación y Desarrollo (Cordis) de la Unión Europea ha difundido sus resultados, como es el caso de los avances en materia de vehículos eléctricos y autónomos o la integración de drones y autobuses para aumentar la seguridad de las operaciones urbanas.

Energy ECS ha trabajado en la creación de soluciones digitales enfocadas en la conexión entre los sectores de la movilidad y la energía para avanzar hacia un transporte más ecológico y así hacer frente al cambio climático y contribuir a la reducción de emisiones contaminantes, a la disminución de la dependencia de los combustibles fósiles y a la seguridad energética.
Para ello, se ha centrado en siete casos de uso, incluidos nuevos modos logísticos, carga bidireccional en red y conducción autónoma segura, con el fin de impulsar nuevos modelos empresariales en ambos sectores.
Se ha desarrollado entre el 1 de junio de 2021 y el 30 de noviembre de 2024, bajo la coordinación de Tietoevry (Finlandia) y con la participación de 30 socios de Finlandia, Alemania, Irlanda, Suecia, Islandia, Italia, Austria y Suiza. Ha contado con un presupuesto de 34.006.721,96 euros, de los cuales la Unión Europea ha financiado 8.575.037,65 euros, y ha concluido con el desarrollo de 16 nuevos productos y servicios.
Casos de uso del proyecto Energy ECS
Uno de los casos de uso ha investigado formas innovadoras de cargar drones para ampliar su alcance geográfico y operativo. En este sentido, se han utilizado techos de autobuses eléctricos como estaciones de recarga para que puedan continuar desplazándose hasta su destino, así como puntos de carga independientes basados en energía fotovoltaica para las zonas más remotas.

En otro caso de uso se han probado autobuses eléctricos que se desplazan de forma autónoma hacia las estaciones de recarga de una cochera. Asimismo, se ha evaluado un sistema de control de microrredes basado en inteligencia artificial para mejorar la resiliencia y confiabilidad de la red eléctrica y permitir la integración de energía renovable y de movilidad eléctrica.
Por otro lado, Energy ECS ha desarrollado tecnologías de carga bidireccional para vehículos eléctricos que permiten aplicaciones Vehicle-to-Grid (V2G), que programan la carga según el cronograma del usuario para que el vehículo esté listo para circular cuando sea necesario.
En base al desarrollo de electrónica y la captación de energía, el proyecto también ha investigado la alimentación de un sensor para la monitorización continua del estado de los neumáticos de los automóviles con el propósito de mejorar la seguridad y las necesidades relacionadas con la conducción autónoma. En cuanto a los dos casos de uso restantes, se han enfocado en los contenedores inteligentes, tanto para el transporte intermodal como para la carga aérea.
Avances en movilidad inteligente
Como resultado de los casos de uso de Energy ECS, en el ámbito de la movilidad inteligente se ha desarrollado una innovadora estación de acoplamiento de drones y un sistema de aterrizaje automático, que permite que aterricen sobre objetivos móviles. Así, se ha demostrado que los drones pueden integrarse de forma segura en los autobuses para aumentar la seguridad de las operaciones urbanas.

También se ha desarrollado un chip de memoria SRAM de consumo ultrabajo para aplicaciones de IoT, sensores y biomedicina, que ya ha sido certificado para su fabricación.
Igualmente, se ha demostrado la utilidad de la captación de energía para alimentar sensores de neumáticos en condiciones reales, complementada con innovadoras estrategias de interconexión. En esta misma línea, se ha aumentado la eficiencia del combustible mediante el control inteligente de los neumáticos y se ha mejorado la eficiencia energética de los vehículos eléctricos autónomos.

Entre los avances en materia de tecnología de vehículos autónomos, se ha logrado una mayor precisión en el posicionamiento gracias a sensores avanzados y la fusión de datos para una conducción automatizada basada en infraestructuras de cocheras de autobuses. En cuanto a las capacidades de detección de la posición y la velocidad, se han mejorado con sensores de interferometría de automezcla (SMI).
El proyecto también ha desarrollado tecnología LiDAR (Light Detection and Ranging) totalmente integrada con un chip fotónico, que proporciona datos 3D y de velocidad de alto rendimiento para soluciones de conducción autónomas, con un alcance validado de 300 metros. Igualmente, ha introducido un nuevo sistema de carga inalámbrica para vehículos aéreos no tripulados, con un diseño ligero de tan solo 50 gramos y la capacidad de suministrar 200 W de potencia.
Resultados en el ámbito de la energía para la movilidad del futuro
Las contribuciones de Energy ECS a los sistemas de redes eléctricas inteligentes y de energía incluyen el desarrollo de un controlador de microrredes integrado con el software de gestión de flotas.
Los socios han colaborado en la implementación de una solución de gestión de datos de energía para la conectividad unificada entre propietarios de activos energéticos en diferentes zonas geográficas. Además, en la fase final del proyecto han puesto en marcha una unidad de control de carga vehicular para facilitar la carga bidireccional V2G. En este ámbito también han desarrollado módulos fotovoltaicos ligeros que incorporan un método innovador.

Entre los impactos previstos a largo plazo, derivados de los resultados de Energy ECS, se incluye la reducción de emisiones, el ahorro de energía, una mayor estabilidad de la red eléctrica en relación con la movilidad del futuro o el impulso del transporte sostenible.
Este proyecto busca ayudar a la Unión Europea a avanzar en la transición ecológica y energética, así como en sus objetivos de resiliencia mediante la comercialización de prototipos técnicamente viables y escalables y la ampliación de los modelos de negocio en colaboración con organizaciones e instituciones de investigación europeas.