Bicibur se ha convertido en cuatro años en uno de los servicios municipales de más éxito, con más de 5.500 usuarios registrados en la base de datos de préstamo de bicicletas y que hacen uso de alguna de las 200 bicis que están situadas en una de las 16 bancadas repartidas por la ciudad.
La concejalía de Movilidad del ayuntamiento de Burgos estudia la posibilidad de que el alquiler de las bicicletas pueda realizarse con la nueva tarjeta bonobús sin contacto. El objetivo es evitar el uso de dos tarjetas, porque con una sola sería posible utilizar los autobuses municipales y beneficiarse del servicio Bicibur, que funciona de 8 de la mañana a 17:30, en invierno, y de 8 de la mañana a las 21 horas en verano.
El concejal de Movilidad, Esteban Rebollo, explica que se trabaja en una modificación del software del sistema informático del Servicio de Autobuses y del Servicio de Préstamos de Bicicletas. De esta manera, las tarjetas de bonobús personalizadas podrán beneficiarse a la hora de alquilar una bici. En la actualidad, los usuarios de Bicibur abonan una cuota anual de tres euros y reciben un carné que les responsabiliza del vehículo de dos ruedas que toman prestado.
Movilidad también adoptará medidas para combatir los actos de vandalismo que sufre Bicibur, sobre todo en los lugares donde se cometen más robos o se producen destrozos. No en vano, desde su puesta en marcha, se han robado casi la mitad de las bicicletas, aunque finalmente se recuperaron gracias a la actuación de las policías Local y Nacional.
Los usuarios de Bicibur pueden ser residentes empadronados en Burgos, o no empadronados que residan, trabajen o estudien en la ciudad, así como los turistas y visitantes que se acerquen a conocer la ciudad castellano leonesa.