Con D-Lock, el sistema inteligente de control de accesos a contenedores desarrollado e implantado por Distromel en numerosos municipios, éstos han visto mejorados sus resultados de tasas de reciclaje.

La normativa sobre reciclaje de la Comisión Europea, en línea con los Objetivos del Desarrollo Sostenible de la ONU, establece objetivos ambiciosos para la reducción de residuos y el reciclaje de los mismos para contribuir a una economía circular y sostenible en la UE. Los Estados miembros deben destinar esfuerzos para lograr las metas fijadas, que también incluyen la disminución del desperdicio de alimentos.
Todo esto obliga a las entidades públicas, competentes de la recogida de residuos, a instaurar sistemas que permitan mejorar el reciclaje, facilitando a los ciudadanos diferentes contenedores donde depositar los residuos de manera clasificada y seleccionada. Además, se recomienda que los municipios instauren sistemas de pago por generación para que el ciudadano pague la tasa en función de lo que genera y, por tanto, de lo que recicla, debido a que el coste de gestión para el municipio depende de estas tasas.
Entre los proyectos implantados por Distromel, son varios los que disponen de tecnología que ayuda a las entidades públicas a implantar sistemas de pago por generación. Y estos, a su vez, incentivan la separación en origen de los residuos y, así, se ven aumentadas las tasas de reciclaje. Algunos ejemplos son D-Lock para el control de accesos a contenedores, D-Door para el control individualizado de la recogida de residuos puerta a puerta o el software siGEUS, que al disponer del módulo PAYT permite asociar la generación de residuos a un domicilio, empresa o actividad comercial.
D-Lock de Distromel
En la actualidad, la gestión de residuos se ha convertido en un desafío crucial para las ciudades. Con el aumento de la población y la generación de desechos, es fundamental implementar soluciones innovadoras que optimicen la recolección y el tratamiento de residuos.
Una de las estrategias más efectivas es la implantación de sistemas de control de accesos a contenedores de residuos y un ejemplo es el dispositivo D-Lock de la empresa Distromel.
Mejor gestión, tasa de reciclaje y responsabilidad ciudadana
La implementación de un sistema de control de accesos permite a las ciudades gestionar de manera más eficiente sus contenedores. Con D-Lock, se puede restringir el acceso a los contenedores a usuarios autorizados, lo que reduce el riesgo de que personas no autorizadas depositen basura en ellos. Esto no solo ayuda a mantener la limpieza y el orden en las calles, sino que también optimiza la recolección de residuos, ya que se puede programar la recogida en función del uso real.
El control de accesos también promueve una mayor responsabilidad entre los ciudadanos. Al limitar el acceso a los contenedores, se incentiva a los usuarios a utilizar adecuadamente los recursos disponibles y a reciclar de manera efectiva. D-Lock puede integrarse con sistemas de recompensas que premien a aquellos que hagan un uso responsable de los contenedores, fomentando así una cultura de reciclaje y cuidado del medio ambiente.
Costos, seguridad y prevención
La gestión ineficiente de residuos puede resultar en costos operativos elevados para las ciudades. Con D-Lock, se puede reducir la frecuencia de recolección al asegurar que el contenedor se recoge cuando los usuarios autorizados han depositado residuos en él. Esto disminuye los costos de recolección y optimiza el uso de recursos, permitiendo a las ciudades destinar esos ahorros a otras áreas críticas.
Además, los contenedores a menudo son objeto de vandalismo y mal uso. Al implementar un cierre inteligente de contenedores como D-Lock, se incrementa la seguridad, ya que solo las personas autorizadas pueden acceder a ellos. Esto protege la infraestructura urbana y contribuye a la creación de un entorno más limpio y seguro para todos los ciudadanos.
Recopilación y análisis de datos
D-Lock no solo actúa como un sistema de control, sino que también recopila datos valiosos sobre el uso de los contenedores. Esta información puede ser analizada para identificar patrones de uso, optimizar rutas de recolección y mejorar la planificación urbana. Al contar con datos precisos, las ciudades pueden tomar decisiones informadas que beneficien a la comunidad y al medio ambiente.
Algunos ejemplos de implantación del D-Lock de Distromel son Burgos, Zamora, Denia (Alicante), L’Eliana (Valencia), San Cristóbal de La Laguna (Tenerife), Mancomunidad Nordeste (Tenerife), Olivenza (Badajoz) o las comarcas de Ribagorza, Sobrarbe y Monegros (Huesca).
La puesta en marcha de un sistema innovador de control de accesos a contenedores de residuos, como el D-Lock de Distromel, permite a las ciudades avanzar hacia modelos urbanos más limpios, eficientes y responsables.