La Comisión Europea ha abierto una consulta pública sobre un proyecto de metodología para el mapeo de la calidad del servicio 5G en la UE. Este proyecto propone un enfoque común que facilita la recopilación de datos comparables entre países y operadores, independientemente de la banda de frecuencia utilizada. Se podrán enviar comentarios hasta el próximo 27 de junio.
La nueva metodología busca aportar una base común para analizar datos. A diferencia de los enfoques tradicionales, que se basan en muestras de prueba para medir la calidad del servicio, este proyecto se orienta hacia el cálculo de la calidad estimada de la conectividad 5G, lo que podría transformar la manera en que se supervisa la evolución de las redes 5G en Europa.
Para mejorar el seguimiento de los objetivos de conectividad de la Década Digital, la Comisión Europea evalúa la posibilidad de emplear esta metodología para calcular un nuevo indicador clave de rendimiento (KPI). Este indicador serviría para medir específicamente la calidad del servicio 5G, un aspecto clave para asegurar que la cobertura no solo sea amplia, sino también efectiva en términos de experiencia del usuario.
Actualmente, el KPI para monitorizar el progreso no tiene en cuenta la calidad del servicio prestado en condiciones de máxima demanda. Por ello, la Decisión de Ejecución (UE) 2023/1353 recoge la necesidad de análisis adicionales para afinar el marco de medición de los objetivos de conectividad, que respaldan este desarrollo metodológico.
Así, pretende convertirse en un instrumento relevante para la formulación de políticas, decidir la asignación de fondos europeos y, potencialmente, las futuras evaluaciones de las ayudas estatales de la UE para implementar de manera más eficiente redes 5G en toda Europa.
Metodología para mapear la calidad del servicio 5G
La consulta pública incluye un cuestionario con el fin de recabar opiniones sobre la adopción de la metodología y la recopilación y explotación de datos, junto con la metodología de mapeo de la calidad del servicio 5G, que está disponible para su descarga.
El desarrollo de la metodología ha contado con la colaboración de expertos académicos y la supervisión de un comité directivo formado por representantes de la Comisión Europea y de agencias nacionales de regulación. También se han tomado en cuenta opiniones de organizaciones como Berec, de la industria y los resultados de pruebas realizadas por las autoridades de países como Polonia, Italia, Grecia y Croacia.
Aunque la consulta está dirigida principalmente a autoridades, operadores de telecomunicaciones y empresas especializadas, la Comisión Europea invita a que otras entidades interesadas también participen en el proceso.